La frase del Mandatario a raíz de la crisis de seguridad y el difícil panorama económico, abrió la discusión respecto a la marcha del país. Mientras algunos apoyan sus palabras, otros discrepan.
Un categórico análisis sobre la situación que enfrenta actualmente el país hizo este lunes el ex Presidente Ricardo Lagos, al señalar que “Chile no está a la altura de lo que fue”, aludiendo a la crisis que en materia de seguridad y violencia nos afecta, así como al difícil panorama económico.
Fue durante su participación en un conversatorio organizado por la comisión Desafíos del Futuro del Senado que el ex Mandatario ahondó en los argumentos de su reflexión: “Cualquiera que tenga un amigo en el extranjero le va a preguntar: ¿Y qué les pasó a ustedes los chilenos? ¿En qué momento se pasmaron? ¿En qué momento empezaron a gastar lo que no tenían?”
Lagos se refirió al caso reciente que involucró a un menor de 14 años que fue detenido en La Florida por presunto sicariato. Al respecto, expresó que “cuando usted ve a un joven de 14 años que acribilla a balazos a otro, bueno, todos sabemos que hoy hay sicarios en Chile y que se contratan, lo que no sabía es que podía haber sicarios de 14 años, ¿qué drama, no? ¡Qué drama!”.
Opiniones divididas
Ambas son ejemplos utilizados por el ex Presidente para explicar su tesis, una que sin duda abre la discusión en el mundo académico y también político. Y si bien algunos comparten su reflexión, otros discrepan.
Consultado sobre si ¿Chile no está a la altura de lo que fue?, el sociólogo, académico de la Universidad de Chile y Premio Nacional de Humanidades y Ciencias Sociales, Manuel Antonio Garretón, comentó a Emol que se trata de “una frase que hay que ubicarla en el resto del contexto de lo que dijo (…) a mi juicio, da dos ejemplos, señalando que el problema tiene que ver con la economía y con la seguridad pública, sin embargo, da dos ejemplos que no corresponde ponerlos juntos”.
A su juicio, “lo que fue ‘el gastar lo que no se tenía’, yo me imagino que se refiere al retiro de los fondos o cosas parecidas -no está claro qué significa eso-, la verdad es que mucho de lo que se puede plantear como crisis económica-social tiene sus raíces en un modelo económico-social que se venía arrastrando y se produce un estallido que lo rechaza y un intento de proceso de generar una nueva Constitución que canalice eso y que también es rechazado el texto”.
“Por tanto, hay una crisis muy significativa en la sociedad chilena que tiene que ver, por un lado, con un modo de organización económico-social y por otro lado, la creciente falta de cohesión, se trata de una sociedad rota, fragmentada, que además tiene una particularidad que es una larga historia del Estado respecto a la incapacidad de haber resuelto problemas, como el que se enfrenta ahora en términos de seguridad pública y en eso tienen responsabilidad todos los gobiernos. Pero no se puede meter todo, aunque claro uno diría que hay una crisis general de la sociedad chilena y esa crisis se expresa en distintos aspectos, muchos de los cuales, se deben precisamente a políticas inadecuados o proyectos insuficientes para haber resuelto esos problemas”, sostuvo.
Con ello, Garretón agregó que “la violencia y la crisis de seguridad pública son un fenómeno de lo más grave que hoy ocurre y es una expresión también; uno, de la falta de cohesión de la sociedad, de la falta de una comunidad política y de la incapacidad del Estado y del mundo político, pero también de muchos de los actores sociales, en haber puesto como cuestión fundamental (…) una idea, un proyecto general para el conjunto de la sociedad, sin olvidar los intereses de cada uno de los sectores, pero siendo capaz de subordinarlos a un proyecto general de sociedad”.
En relación a los dichos del ex Presidente Lagos, el director ejecutivo del Instituto de Estudios de la Sociedad (IES), Claudio Alvarado, planteó, en cambio, que “me parece una reflexión muy pertinente, porque el Chile de la transición, con todas sus miserias y tareas pendientes, se caracterizó por su estabilidad económica y por lograr pacificar el país a partir de grandes acuerdos, que son justamente los temas a los que apunta el ex Presidente Lagos”.
“En ese sentido, es indudable que la nueva generación de izquierda que despotricó irreflexivamente contra ese período y que hoy está en el poder, ha conseguido una gran paradoja: Que hoy los chilenos añoren todo aquello que hoy parece perdido. Si se quiere, la generación del Presidente Boric ha sido la mejor defensora, por contraste, de los vilipendiados 30 años”, expresó Alvarado.
Según el director ejecutivo del IES, “quizá lo único que se echa de menos en la reflexión de Lagos es algún tipo de autocrítica: La centroizquierda demoró muchos años en sacar la voz, defender su obra y distinguirse de quienes hoy están en el poder. Sería deseable que el ex Presidente se pronunciara al respecto, de seguro tendría algo que decir”.
En el programa Agenda Mirada Política de Emol TV, el profesor del Departamento de Filosofía de la Universidad de Santiago de Chile (Usach), Mario Sobarzo, discrepó al afirmar que “yo no creo que haya habido un pasado así como que idealicemos ni mucho menos, yo creo que efectivamente, me imagino que Ricardo Lagos se refiere a los 30 años de la Concertación, fundamentalmente e incluyendo el gobierno de Sebastián Piñera en el primer Gobierno, donde todavía podríamos decir que existía cierto nivel orden, cierto nivel de institucionalidad. En el fondo tiene que ver con las dos miradas respecto de la democracia, una que tiende a enfatizar en el tema de la institucionalidad y la otra de la representatividad o masividad que puedan tener los sistemas políticos, son dos teorías sobre eso, no es que una sea superior”.
“Él le pone mucho más énfasis al tema institucional, porque le tocó vivir el proceso de la transición de la dictadura a democracia, pero en el caso de lo que tenemos hoy día, lo que nosotros hemos visto es una crisis que tiene que ver con otros factores. Tiene que ver con el adelgazamiento de los partidos políticos (…) Por la pérdida de desconexión que tienen los partidos políticos y las diferentes instituciones (…)Todo esto pareciera que lleva a una crisis de la institucionalidad, pero yo pienso que no es exactamente eso, sino que es la desconexión de estas instituciones con la sociedad civil”, precisó Sobarzo.
A
l contrario, el académico de la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI), ex ministro de Hacienda y presidente de Horizontal, Ignacio Briones, opinó en el mismo medio que “coincido absolutamente y el Presidente Lagos siempre ha tenido esa mirada de Estado, a varios años plazo y yo valoro y celebro aquello y creo que tiene toda la razón. Un dato, llevamos estancados diez años, esa es la verdad, cuando tú miras el dato del crecimiento económico per cápita por habitante, en promedio, la verdad es que en los últimos años ha sido 0,5% al año, básicamente nada. Y si tú te preguntas cuáles son las grandes reformas estructurales, de largo plazo, que van a aumentar la productividad y la inversión, por el lado económico, y las grandes reformas sociales, no encontramos muchas”.
“Eso tiene que ver con algo que también planteó el ex Presidente Lagos, yo también lo he venido insistiendo hace tiempo y varios han levantando la voz, que es el problema estructural que tiene Chile, que es su incapacidad de llegar a acuerdos políticos que permitan apalancar esas grandes reformas que necesitamos. Esto dice relación con un sistema político disfuncional, completamente fragmentado, con un montón de díscolos, que hace imposible llegar a acuerdos. Si no cambiamos ese problema, vamos a seguir pedaleando, empantanados, lento, en la mediocridad y frustrando expectativas que la ciudadanía tiene”, manifestó Briones.
Mirada política
Desde el Gobierno tampoco fueron indiferentes a las palabras del ex jefe de Estado, así el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, aseveró ayer que “el ex Presidente tiene razón en términos que los tiempos cambian y cada cual le corresponde hacerse cargo de sus tiempos, de sus conflictos y de la realidad que vive Chile”.
“Entiendo que el Presidente habrá enfrentado otro periodo del país, agradecemos sin duda el aporte que el ex Presidente Lagos hizo al país en su condición de ex jefe de Estado, pero nos corresponde ahora gobernar a nosotros. Y los conflictos que enfrenta el país, las capacidades que tiene y la orientación política que tiene el país para resolver esos conflictos, tal vez hoy día son otros”, enfatizó Monsalve.
Y agregó que “no le quepa duda al ex Presidente, como tampoco le debe quedar duda a los chilenos y chilenas que este gobierno se va a hacer cargo de los problemas de seguridad, porque entiende que la seguridad es un derecho de todos los chilenos y ese derecho el Gobierno está determinado, por instrucciones del Presidente de la República a garantizarlo”.
Los dichos de Lagos también hicieron eco en el Congreso, así el diputado Francisco Undurraga (Evópoli) afirmó que “encuentro mucho sentido que un ex Presidente de la República no se reste del debate nacional con la experiencia que él tiene”.
Según Undurraga, este difícil panorama, “es algo que ya se está constatando no solamente a nivel de sicariato, sino que a nivel de narcotráfico, de terrorismo en La Araucanía. Hemos perdido la capacidad de poder reestablecer el Estado de Derecho, eso nosotros lo venimos diciendo hace muchos años y mucho tiempo. Cuenta con todo mi apoyo el Presidente Lago en sus expresiones y ojalá podamos tomarlo en serio”.
“Lo que plantea el Presidente Lagos es cierto, estamos en una grave crisis de seguridad pública, las nuevas formas delictuales que son mucho más violentas y han llegado desde el extrajera a nuestro país, están afectando a nuestra convivencia nacional y esta es una crisis que tenemos que enfrentar con mano dura y una política que sea transversal, a través de los acuerdos, esa es la única vía”, acotó el diputado Raúl Soto (PPD).
En ese contexto, Soto dijo “compartir la preocupación del ex Presidente Lagos e instamos por cierto a todos los sectores a tratar de enfrentar en conjunto esta situación, porque sin duda es un tema que no dice relación con los colores políticos, sino que con cuidar a nuestra patria y cuidar a nuestro país, tratar de generar condiciones de una vida tranquila y en paz para nuestros compatriotas. Lamentablemente eso se ha perdido en los últimos años en Chile”.
