“Los equipos de esta Superintendencia (de Salud) ya se encuentran trabajando en la verificación de estas alzas, para informar a la ciudadanía, dentro de los próximos días, el porcentaje de alza que cada Isapre podrá adecuar a su plan de salud”, dijo ayer el ente regulador, luego de informar que nueve de las 10 aseguradoras del sistema solicitaron aumentar los precios.
A pesar de que tiene hasta el jueves 29 de febrero para entregar los resultados, desde la entidad señalaron que es probable que mañana ya se conozcan.
En diálogo con El Diario de Cooperativa, el exsuperintendente Patricio Fernández (2019 y 2022) explicó hoy que la tarea de este organismo es revisar los datos que presenta cada isapre, visar las alzas en caso de ser correctas y determinar el monto de cada aumento.
“Fundamentalmente, lo que se va a analizar es cuáles han sido las variaciones específicas en el precio de las prestaciones para cada isapre, cuáles han sido las variaciones de frecuencia entre un periodo y otro para cada isapre y cómo ha variado también el gasto en licencias médicas de un periodo a otro”, indicó.
Fernández recordó que el Índice de Costos de Salud (ICSA), que fijó en 7,4% el techo máximo en que las isapres pueden incrementar el valor de los planes de salud, “es un indicador que es general para toda la isapres; por lo tanto, lo que ocurre en este proceso de verificación es que se revisa la situación particular de cada isapre y por eso el resultado final del reajuste es distinto”.
“No me atrevería en este caso a aventurar porcentajes por isapre, pero sí lo que se puede decir es que efectivamente va a reflejar probablemente las diferencias de costos que tienen”, agregó.
Consultado al respecto, el economista David Debrott, experto en regulación y sistemas de salud, criticó que el mecanismo aplicado no se haga cargo de la verticalidad que existe entre algunas isapres y prestadores de salud, pese a considerarlo un avance.
“Cuando se generan estas dinámicas de regulaciones de las alzas de precios, cualquier empresa empieza a organizar la información para justificar mayores alzas. Eso es un tema que está demostrado en la regulación en múltiples industrias y en todos los países. Eso es súper complejo cuando existe una relación vertical entre el seguro y el prestador”, expuso el académico de la Universidad de Santiago.
“Cuando son de un mismo dueño, como las clínicas no tienen regulación prácticamente en nada, yo puedo inflar los costos de las prestaciones de salud y con eso yo mismo justifico una alza de precios a nivel de la isapre”, añadió.
PREOCUPACIÓN POR SEGUNDA ALZA EN 2024
Respecto la ley corta que ahora se discute en la Comisión de Salud de la Cámara Baja, el senador socialista Juan Luis Castro relevó que, durante su paso por la Cámara Alta, “hicimos observaciones muy críticas respecto del segundo reajuste de precios que viene en agosto, y la autoridad ha dicho que va a poner una regulación, un límite máximo“.
“Yo espero que así ocurra, porque de lo contrario, dos alzas en el mismo año podrían ser un golpe letal a miles de personas que pueden huir de las isapres, pueden judicializar de nuevo -que tienen su derecho-, pero sobre todo, dejaría al sistema en un punto muerto, ya que no se estaría resolviendo el problema de fondo, que es el abuso en el precio”, advirtió.
A juicio del presidente de la Comisión de Salud del Senado, tal aspecto “lo más importante es que el Gobierno tome nota, corrija la ley corta, y así logre dar los beneficios que los fallos judiciales otorgaron a casi tres millones de chilenos que están en el sistema de isapre”.