Aunque es un argumento que en los partidos oficialistas rehúsan abordar o instalarlo en el debate, quienes conocen la discusión interna que se ha dado en los últimos meses, aseguran que las últimas derrotas de la izquierda y el complejo panorama presidencial que se asoma, son ineludibles a la hora de tomar la decisión.
Los consejeros oficialistas ratificaron la tarde de ayer la posición que ya habían adelantado los principales liderazgos del sector, incluida la centro izquierda: qué votarán «En contra» del texto propuesto por el Consejo Constitucional.
Desde el sector han salido a fortalecer en los últimos días las críticas al texto y al proceso, en el que estuvieron en minoría. Pero en el propio oficialismo reconocen que más allá de los contenidos, hay un tema que también empujó la decisión que tomaron: el factor electoral.
Aunque es un argumento que en los partidos oficialistas rehúsan abordar o instalarlo en el debate, quienes conocen la discusión interna que se ha dado en los últimos meses, aseguran que las últimas derrotas de la izquierda y el complejo panorama presidencial que se asoma, son ineludibles a la hora de tomar la decisión.
El complejo escenario presidencial para el oficialismo
Tanto en el Socialismo Democrático como en Apruebo Dignidad ha comenzado una soterrada carrera por instalar liderazgos que puedan hacer frente al avance de Evelyn Matthei y José Antonio Kast. El objetivo: evitar que el oficialismo se quede afuera incluso de una eventual segunda vuelta, como ya han mostrado algunas encuestas.
De ahí que ambos sectores estén trabajando en perfilar algunas figuras. En el PPD, por ejemplo, la nueva directiva y las distintas fuerzas del partido se han cuadrado para potenciar la figura de la ministra del Interior, Carolina Tohá, mientras en el PS ya no se cierran ni siquiera a un retorno de la ex Presidenta Michelle Bachelet.
En Apruebo Dignidad, en tanto, Camila Vallejo ha asomado en los últimos meses como una figura que podría reunir al mundo PC y del FA, este último, fuertemente golpeado por el Caso Convenios.
«Apostar al caballo ganador»
Si bien en el Socialismo Democrático no dramatizaban la opción de apoyar el texto que surgiera del proceso -incluso varios de sus liderazgos lo veían como una opción de retomar la hegemonía frente a la izquierda más radical-, con el paso del tiempo y las cifras de las encuestas inclinadas hacia el «En contra» se fue haciendo cada vez más difícil la opción de jugársela por el «A favor».
Esto, dado que los podía poner una vez más en el lado de los derrotados y asumiendo un costo, dicen, donde la principal responsabilidad la tendría el Partido Republicano, que contó con mayoría en el consejo. «No hay capital político hoy día para una apuesta así. El ‘En contra’ es apostar al caballo ganador», explica una fuente del sector.
En Apruebo Dignidad, por otro lado, la posibilidad de que gane el «En contra» aparece derechamente como un salvavidas, ya que permitiría, explican, de algún modo, equiparar la cancha con la derecha y recuperar al sector y al gobierno de las derrotas que sufrieron en el plebiscito de salida del proceso anterior y luego en la elección de consejeros constitucionales.
Si eso puede derivar en potenciar un liderazgo de cara a las presidenciales, dicen, aún está por verse, pero abre una opción.
«Esto va a quedar divido en dos mitades -si es que logra remontar la campaña del «A favor»- y es evidente entonces que desde una mitad, es más fácil levantar una candidatura presidencial con opción de pasar a segunda vuelta», explicó Pepe Auth en el podcast Política para Adultos de El Líbero.
