A casi un mes del plebiscito constitucional del próximo 17 de diciembre, el excomisionado y ahora vocero del ‘En contra’, Gabriel Osorio (PS), defendió sus razones para rechazar la propuesta de nueva Carta Magna elaborada por el Consejo, haciendo hincapié en que “repite los mismos errores que la Convención pasada, en el sentido de utilizar una mayoría para determinar programáticamente, a veces, los contenidos de un texto”.
El abogado fue más allá y respondió con una dura autocrítica tras ser consultado respecto a si el texto de la Convención Constitucional, en comparación a la propuesta del Consejo, entregaba más certeza jurídica.
“Me equivoqué (al votar Apruebo). Nosotros aprendimos de ese error. Ambas propuestas tienen las mismas características desde el punto de vista programático, aun cuando el mérito del programa sea distinto”, sostuvo en conversación con Radio Duna.
Osorio agregó que fue “bastante crítico” del proceso pasado, particularmente respecto a la regulación del sistema político. “Sin embargo, yo también tenía un compromiso político por tener una nueva Constitución y, desde el punto de vista de mi conciencia, uno puede aprender también de las experiencias, rectificar los errores que se cometieron, y no es un asunto solamente de realismo político”, argumentó.
Tras observar y participar de ambos procesos, el experto dijo estar convencido de que “en un órgano constituyente sus mayorías deben ser utilizadas de una manera muy delicada, en atención a que están determinando las reglas de la democracia futura, no es lo mismo que un Congreso Nacional”.
Pese a cuestionar ambos proyectos constitucionales, el exintegrante de la Comisión Experta llamó a dejar atrás el debate por lo emanado desde la Convención el año pasado. “El texto de la Convención ya desapareció con el plebiscito del 4 de septiembre, el 62% de los chilenos estimó que era un texto malo. Entonces, esa discusión ya fue”, sugirió.
“Me quedo con la Constitución de 1980″
El excomisionado del PS insistió en que la propuesta del Consejo “es mala y puede generar problemas interpretativos”, pero defendió la labor de la Comisión Experta, puesto que -a su juicio- lo que sus doce miembros hicieron dista mucho del resultado final del texto: “Si usted ve lo que nosotros presentamos en la Comisión Experta, y en el anteproyecto, y si usted analiza todas las propuestas que nosotros hicimos en el texto, ninguna decía relación con un texto programático”.
Al comparar la Carta Fundamental vigente y el proyecto del órgano redactor, el abogado concluyó -”con mucha sorpresa”- que “este texto es peor que la Constitución de 1980, porque petrifica aún más la discusión democrática”.
“Yo hoy me quedo con la Constitución de 1980″, aseguró Osorio. Sin embargo, precisó que “no se trata de que sea la mejor, sino que usted ha tenido 40 años de práctica de la Constitución de 1980″.
En ese sentido, explicó que “no es solamente lo que dice la Constitución, sino también su práctica política, su puesta en marcha jurisdiccional. Al menos lo conocemos, sabemos cuáles son los límites”.
