Por cerca de diez horas, sin interrupción, este martes los presidentes, secretarios generales y expertos electorales de los partidos del oficialismo y la Democracia Cristiana (DC) han permanecido congregados en la sede del Partido Socialista para intentar destrabar, de una vez por todas, las negociaciones de cara a la elección municipal de octubre. Y es que el plazo para inscribir primarias concluye este miércoles a las 23.59 horas.
La conversación, que aún se desarrollaba hasta el cierre de esta edición, fue extensa y a ratos tediosa. Tanto así que durante la tarde Marco Velarde, presidente de Comunes, bajó a jugar cartas “Uno”. Otros, como el presidente del Partido Liberal, Juan Carlos Urzúa, estaban atentos al resultado del partido entre el Real Madrid y el Manchester City, válido por la UEFA Champions League.
Ni siquiera hicieron una pausa para almorzar fuera, sino que pidieron a domicilio pollo asado con arroz o puré en el local “Donde JC”, que degustaron en la misma sede. En la noche, en tanto, ordenaron pizzas.
Si bien los dirigentes presentes en la negociación enfatizaban que los avances eran pocos, a lo largo de la jornada lograron desenredar algunos nudos. Uno de los más significativos fue la conversación que hubo entre los socialistas y los comunistas, con la que se logró acordar, por ahora, dar de baja la candidatura de Johnny Carrasco (PS) en Pudahuel, en beneficio del actual alcalde, Ítalo Bravo (Ind.), quien es respaldado por el PC.
Eso, sin embargo, a cambio de que el PS desista de sus intenciones de quedarse con Copiapó, hoy en manos del alcalde Marcos López, contra quien se alzó la integrante del comité central comunista, Rosa Ahumada. Este era un punto de alta tensión entre ambas colectividades. De hecho, el lunes Bárbara Figueroa -secretaria general de los comunistas- y Juan Andrés Lagos permanecieron en la sede socialista hasta pasadas las 20.00 horas, mucho después de que la mayor parte de los negociadores se retirara.
Además, días atrás, Figueroa tuvo un cruce por el tema con su par PS, Camilo Escalona, en la mesa negociadora.
Para lograr destrabar los nudos, lo que hicieron los partidos el martes fue repartirse las salas del segundo y tercer piso del Partido Socialista. Así, había un espacio para la DC, otro para el Frente Amplio (Diego Ibáñez se apostó en la oficina de la Juventud Socialista) y uno para el PS, entre otros. Y los dirigentes iban de un espacio a otro dependiendo de las comunas de las que quisieran hablar.
Hasta el cierre de esta edición, aún se mantenían fuertes nudos en comunas como Independencia (disputada entre CS y PS), Huechuraba (PPD, PS y PL), Rancagua (FRVS y FA), Quilicura y La Granja (DC y PS). Por otra parte, estaba relativamente claro que habría primarias en Pucón, Antofagasta, La Florida y Puente Alto, entre otras.
En las colectividades del oficialismo llamó la atención que durante la jornada de negociaciones se pasearan por la sede dos candidatos del PS en las zonas de conflicto, Leonardo Igor (Huechuraba) y Juan Valdés (La Granja).
En Acción Humanista, el partido encabezado por el diputado Tomás Hirsch, han sacado cuentas alegres, puesto que lograron proteger la única comuna en la que tienen un alcalde en ejercicio: La Cisterna, con Joel Olmos, a contrapelo de las pretensiones iniciales del PPD y CS.
Otra baja que llamó la atención entre los partidos fue la de la precandidata a alcaldesa por Providencia, Josefa Errázuriz (PPD), quien compartió una carta en la que señaló que “soy consciente de que mi nombre no es un factor de unidad”. Y es que, en todo caso, su posibilidad de competir fue duramente cuestionada por el Frente Amplio y también por sectores del Socialismo Democrático.
Los dirigentes de los partidos también están atentos a lo que pase en Peñalolén, actualmente gobernada por la alcaldesa Carolina Leitao (DC), quien está impedida para ir a la reelección.
Si bien la DC la concibe como una de sus cuatro comunas emblemáticas, durante la jornada de negociación se abrieron a realizar primarias ahí. Eso, en todo caso, solo si es que se logra consolidar un criterio común que aplique para el pacto. De hecho, el fin de semana la decé propuso uno para proteger el 60% de las comunas de cada partido en que el alcalde está en su tercer y último período. Sin embargo, aún no queda fijado, lo que ha provocado que la Democracia Cristiana comience a perder la paciencia.
En esa línea, desde el partido sugieren que ellos solo inscribirán el pacto una vez que esté claro lo que ocurrirá en cada una de las comunas. Así, se oponen a la postura del oficialismo, sobre registrarse ante el Servel este miércoles a las 10 de la mañana.
La apertura a primarias en Peñalolén, sin embargo, no dejó contentos a todos en la DC. El presidente regional Metropolitano de la DC, Rodrigo Albornoz, dijo que “la eventual entrega de Peñalolén es el reflejo de una historia que se veía venir. Orrego tiene interés de instalar a su candidato (en referencia a José Ruiz) y la izquierda al suyo. Esta situación confirmaría la debilidad de nuestra negociación y la escasa voluntad de la izquierda en un acuerdo sincero con la DC”.
Otro momento que generó tensión al interior de la mesa negociadora fue cuando Velarde solicitó explicaciones a la secretaria nacional de la DC, Alejandra Krauss, por los dichos del diputado Alberto Undurraga y otros dirigentes en la junta nacional, los que fueron publicados por La Tercera. Ante el emplazamiento, la abogada le explicó que se trataba de una filtración de una instancia partidaria privada y no de “cuñas”.
