Fue en la comisión política del lunes pasado que el presidente de RN, el senador Rodrigo Galilea, planteó un tema que tiene preocupada a su directiva: lo que será el discurso de Chile Vamos después del plebiscito constitucional del próximo 17 de diciembre. Sea cual sea el escenario -si gana el “A favor” o el “En contra”- en la UDI, RN y Evópoli ya empezaron a preparar el relato que esperan transmitir.
Hasta el momento los partidos están volcados a trabajar para que se apruebe la propuesta emanada por el Consejo Constitucional, pero lo cierto es que los resultados de las encuestas están en su contra. De acuerdo al sondeo del Centro de Estudios Públicos (CEP) de este lunes, solo un 8% se declaró por el “A favor”, mientras que un 30% afirma estar por el “En contra”. De todas maneras, la misma encuesta reveló que un 53% de los consultados aún no decide su voto, lo que mantiene con expectativas al sector.
Pese a ello, el análisis que se ha hecho es que el resultado del plebiscito será una especie de vara de medición para próximos desafíos electorales, como por ejemplo las municipales de 2024 y las parlamentarias y presidenciales de 2025.
En Chile Vamos algunos recalcan que parte importante del mensaje será resaltar la unidad de la oposición, pues la UDI, RN, Evópoli y el Partido Republicano actuaron por una misma causa junto con colectividades de centro como Amarillos y Demócratas. En ese sentido, el mensaje que se espera impulsar hacia el futuro es que esa unidad se puede repetir en los próximos desafíos electorales, como las municipales y también las presidenciales para derrotar a la izquierda. De hecho, una victoria hace más fácil que después se pueda entablar una negociación para dichos comicios.
En caso de ganar, además uno de los desafíos para Chile Vamos es cómo capitalizar la victoria, en el sentido de que el Partido Republicano fue uno de los principales protagonistas del proceso constituyente, al ser esa colectividad la que dominó en mayoría el Consejo Constitucional.
De hecho, eso ha sido motivo de conversación entre algunos sectores del bloque que no quedaron conformes con que el trabajo del Consejo no terminara siendo apoyado de forma transversal, sino visado solo por la derecha.
En el sector temen que finalmente los republicanos sean quienes se adjudiquen la victoria y, por ende, queden mejor aspectados para los próximos desafíos electorales, un escenario que reconocen les genera un dilema.
Así, parte del mensaje que se quiere entregar es que Chile Vamos tuvo razón al darle continuidad al proceso constituyente, luego de que en el último plebiscito de salida se impusiera el Rechazo.
También se recalcará que el nuevo texto constitucional entregará estabilidad al país y que es una buena forma de cerrar la puerta de una vez por todas al debate constitucional.
En el caso de una derrota, parte del discurso de Chile Vamos será hacer frente a los próximos desafíos electorales del futuro y a que no se volverá a abrir el proceso constituyente. En esa línea, se emplazará a la izquierda a que no intente buscar una nueva alternativa para un tercer intento.
En ese sentido, buscarán recalcar la “coherencia” con que, dicen, actuó el sector para darle continuidad al proceso constituyente. Esto debido a que el mensaje de Chile Vamos para llamar a votar Rechazo, en el pasado plebiscito de salida, es que se iba a abrir un nuevo camino.
Y, pese a las presiones que hubo desde sus propias filas, la UDI, RN y Evópoli levantaron un nuevo proceso que dio lugar al Consejo Constitucional. Ese relato de “coherencia”, recalcan, lo marcarán diciendo que hubo partidos que estaban por no tener una nueva Constitución en el primer plebiscito, pero que respetaron la democracia cuando el referéndum de entrada dio lugar al proceso constituyente.
En los últimos días en Chile Vamos se comenzó a instalar un ambiente pesimista debido a que varios creen que podrían perder. Eso sí, los republicanos siguen convencidos de que darán vuelta el escenario que muestran las encuestas y se logrará imponer el “A favor”.
Dentro de los factores que inquietan al sector (y que creen que influyen negativamente en sus posibilidades) están el corto periodo de campaña que hay, la baja información que maneja la ciudadanía sobre el proceso y el poco interés que hay en el tema.
Esta semana la alcaldesa de Providencia y liderazgo presidencial, Evelyn Matthei (UDI), desdramatizó una posible derrota del “A favor” y afirmó que “no va a tener ningún efecto en la política”.
De todas maneras, apuestan a que, en caso de salir derrotados, el margen sea estrecho.
