La crisis de violencia que se desató en Ecuador tras la fuga de un líder narco desde la prisión de ese país, llevó a cuestionar el estado actual de los recintos penales en Chile. Sobre todo en medio de la crisis de inseguridad que se vive.
Este domingo, el ministro de Justicia, Luis Cordero afirmó que «el Estado de Chile tiene control total de las cárceles y sabe lo que sucede en su interior». Y días antes, el Presidente Boric le solicitó un informe detallado de la situación carcelaria en Chile.
En un nuevo «Mirada Líbero», el ex director de Gendarmería entre los años 2018 y 2022, Christian Alveal, le respondió al ministro e hizo un análisis sobre el estado de las cárceles y la presencia del crimen organizado que opera dentro de los recintos. «Garantizar que hoy día tenemos el control total de las cárceles es una afirmación bastante riesgosa», advirtió.
Alveal explicó que «la cárcel muchas veces amplifica lo que está ocurriendo en ciertos territorios». Y sobre la situación actual dentro de ellas, el ex director de Gendarmería aseguró que «es una aberración sostener que, en materia de eficiencia, eficacia, somos una institución que otros pueden mirar, porque desde nuestras cárceles se están generando delitos al interior y eso es nefasto para cualquier sistema carcelario».
A su juicio, «es un fracaso» que delincan desde la cárcel a pesar de estar privados de libertad. «No hay ningún sistema carcelario en el mundo que crea ser exitoso, o tener control de lo que está ocurriendo, si desde las cárceles se cometen delitos», subrayó.
Alveal aseguró que «se necesita una intervención mayor que no depende de un solo Gobierno».
«Para que realmente esto mejore tienen que haber grandes acuerdos para que el que decida ser un delincuente profesional tenga una respuesta dura, porque es la única manera de que la cárcel sea disuasiva y no la consideren su segunda casa», explicó. «Se tiene que pensar en un rediseño de la institución carcelaria, porque la estructura actual no da abasto para enfrentar esta nueva criminalidad», dijo.
«Si no hacemos algo lo que está ocurriendo en Ecuador no va a ser nada extraño para Chile»
De acuerdo con Alvear, «la población penal está cambiando cualitativamente a una velocidad que el Estado no está respondiendo. Es un riesgo inminente y si no hacemos algo hoy día, lo que está ocurriendo en Ecuador no va a ser nada extraño para Chile quizás en muy corto plazo».
Planteó que «la delincuencia organizada tiene un perfil muy distinto, muy violento, con un poder adquisitivo que no tiene la delincuencia común» y que, por lo tanto, «es clave separarla dentro de las cárceles, porque son ellos los que generan violencia».
«Estando en la cárcel no es que hemos desbaratado una banda criminal, ellos se reorganizan y logran transformar las cárceles en espacios en donde tienen verdaderas empresas de coordinación delictual y que operan a través de sus soldados en las calles, el centro de operaciones criminales es la cárcel», argumentó.
Además, advirtió que existe un riesgo de que «delincuentes que provienen del extranjero pueden estar contaminando, generando una formación de delincuentes mucho más compleja dentro de la cárcel».
En esa misma línea, el ex director de Gendarmería informó que «desde el 2019 al 2023 la población venezolana privada de libertad creció en 1.124%. Ninguna población extranjera creció a ese ritmo en tan corto plazo». «Hubo una decisión de estos grupos criminales de tomar el control de Chile y empezar a generar un control territorial», sostuvo.
“Creer que porque no usamos uniforme vamos a estar protegidos es un error”
Hace unos días, desconocidos lanzaron panfletos con amenazas contra el ministro de Justicia, el actual director de Gendarmería y otras autoridades, en tres recintos penales distintos. Tras ello, se instruyó a los funcionarios evitar usar su uniforme o cualquier distintivo en la vía pública.
Alveal desestimó la medida y dijo que «creer que sacarnos el uniforme significará una mayor protección, es desconocer cómo opera el crimen organizado».
«Cuando tú eres una amenaza para el crimen organizado da lo mismo si tienes o no un uniforme que te caracteriza, porque para ellos representas un riesgo», y añadió: «Creer que porque no vamos a estar uniformados vamos a estar protegidos es un error».
A su juicio, «el Estado tiene que avanzar en estas circunstancias, cuando se siente más amenazado, tiene que estar más unido. Esta medida, lejos de potenciar lo que debemos hacer, lamentablemente debilita al Estado, porque es una señal que nos hace retroceder».